Me dijiste “te quiero”
y me preguntaste si yo
por ti siento lo mismo
y debo decir que no.
Siento mucho no quererte
y no juzgues mi verdad
pues mi alma al entregar
se fue a vagar a otros mundos,
tomó sola otros rumbos
y no pudo regresar.
A vagar mundos profundos
de solo puro sentir
para poder definir
lo que hoy el corazón siente
y descubrir que quererte
es imposible lograr
pues el sentir va más allá
de solo meros quereres,
de solo carnes y pieles,
lo mío, amor, es amar.
Amar hasta el límite humano
sin límites ni razón
hasta sentir el dolor
de no poder amarte más.
Impregnarte en mi mirar
igual que en mi corazón
para cuando tú te vas
robarte como ladrón
tus sueños, pensar, pasión,
sin tener que despertar.
Ya ves por qué no te quiero
porque solo sé amar,
amar, amar y soñar
con cada nuevo encuentro
para volverme a entregar.
Entregarte la locura
de mi pasión desatada
y encontrar en tu mirada
que me das el corazón,
y yo mi vida y mi alma.
Lo mío, amor, es amar…
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